Cereza

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martes, 5 de octubre de 2010

Mi Masturbacion...

Desde un inicio mi Señor me dijo que tenia prohibido el masturbarme, hoy me di cuenta que nunca hablamos de ello para definirlo, o bien, para saber SU definición que ya seria la mía, y esto fue porque estando acostada descansando lo recordaba y en mi interior comenzó a sentirse ese cosquilleo… no podría definirlo de otra forma ya que esa sensación vino desde mis ojos cruzando por mis labios, bajando a mi cuello, senos y claro, se instalo justo en ese sitio que no hacia mas que provocarme un no se que muy placentero.
Estaba sola en casa, termine de bañarme y envuelta solamente en una toalla me recosté en la cama, las cortinas cerradas, la temperatura fresca, la música en un volumen medio, pues claro que estaba relajada, cerré mis ojos y comencé a divagar en nuestro ultimo encuentro, lo primero que me vino a la mente fue la imagen de esas tiras de color negro colgadas, que al acercarme mas me percate estaban ajustadas para que pudiera poner mis piernas y brazos quedando suspendida en el aire, creí que bromeaba, pero cuando escuche como tomaba la silla y la acercaba a mi para tener la altura adecuada para montarme caí en cuenta que no era broma, me pondría en ese arnés.
Al estar recordando esto ya sentía que mi humedad crecía, un pequeño espasmo fue lo que sentí al pensar como me penetro aquel día estando así, como tenia la facilidad de moverme a su antojo separándome y acercándome y yo colgada como un títere… mis manos estaban también colocadas hacia arriba podía sostener mi cabeza pero no podía tocarle a El, la verdad no era necesario, pero me hubiese encantado poder tomar su cabello entre mis dedos y alborotarlo como en otras ocasiones lo pude hacer, llego un momento en que cerré los ojos y me deje llevar con la oscilación, mi orgasmo en esa postura llego de pronto, las contracciones internas fueron un poco mas frecuentes y ceñidas que en otras ocasiones, cuando salio de mi cayo al piso un liquido transparente y me dijo que era Mio, mi eyaculacion…
Para ese rato yo ya estaba muy húmeda, quería tocarme pero lo tenia prohibido, no podía pasar mis dedos entre mis labios, meter un par en mi vagina ni sentir como se calentaban y resbalaban, el roce que pudiera tener con mi clítoris motivándolo a tener un rico orgasmo, me lo tenían PROHIBIDO…
Mi mente siguió divagando entre los recuerdos de un par de días atrás, como esa rica vez que subimos al elevador y me beso con pasión metiendo sus dedos debajo de mi falda hasta tocar mi ano…. O la ves que recorríamos la ciudad rumbo al centro y se sacaba su miembro erecto para que lo chupara, lamiéndolo y succionando en plena vía publica con camiones de pasajeros al costado que podían observar mis nalgas sin ser cubiertas por ropa interior…la vez del restaurante donde me subiola falda tanto que el mismo mesero paso mas de 20 veces a ver si necesitábamos algo mas, solo para observar con claridad mi pubis depilado.
Pero sin duda lo que termino de intensificar mis líquidos fue el traer a mi mente la ocasión que estábamos en un rincón de fiestas, donde entre la música y los bailadores estábamos en un sillón junto a la pista cuando me besaba a la vez que metía sus dedos a mi entrepierna moviendo mi clítoris con una habilidad y luego metiéndolos en mi vagina y moviéndolos al compás de la música, yo no me di cuenta quien estaba ami alrededor, solo cerré los ojos y vivía con total entrega sus besos, sus caricias, sus jugueteos, esa actitud de travesura y maldad que lo llevo a darme un rico orgasmo publico.
Ya no necesitaba mucho para venirme, en realidad solo pase la toalla por mi clítoris cuando ya sentía el orgasmo venir, pero hubo algo en mi mente que no lo dejo llegar, algo impedía yo pudiera disfrutar mas aun de esos recuerdos, de esas vivencias…
Y lo entendí, ya no me pertenezco, mis necesidades físicas están condicionadas a su voz, a sus ordenes, a sus caricias, a sus castigos, y pues deje de estar imaginándome en sus brazos en ese momento, no tenia caso torturar mi cuerpo a algo que no tendría culminación.
Fue entonces cuando sonó en mi celular la canción de “Ne me quite pas” de Edith Piaf, era un mensaje de EL donde me indicaba lo veré mañana miércoles a las 8am justo fuera de mi casa. Y una línea mas que decía –tengo ganas de cogerte perrita--
Seria que lo invoque? Seria que El también tenia los mismos pensamientos, y esta relación AMO-sumisa es mas profunda? O simplemente somos un par de seres calenturientos que necesitamos de un buen sexo y sabemos quien nos lo puede dar?
No lo se, pero estoy segura que mi entrega es total, ya soy de El en Cuerpo, Mente y Alma.

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